Parasitología
Leishmania, el parásito que afecta a millones de personas

Charo Céspedes Rubio
Biología | Bacteriología y Laboratorio Clínico | Microbiología Clínica
24 feb 2025
Esta zoonosis causada por más de 20 especies del género de parásitos protozoarios leishmania, se trasmite a través de la picadura del mosquito flebótomo hembra (más de 90 especies) que se alimenta de sangre.
Estos mosquitos miden 2-3 mm, depositan sus larvas en grietas de muros, alcantarillas, vertederos, etc. y necesitan de temperaturas moderadas preferentemente en un clima mediterráneo semiárido, siendo su actividad mayor durante el atardecer.
En los países subdesarrollados, la enfermedad está asociada a malnutrición, migraciones de población, condiciones higiénicas deficientes y a cambios en el entorno (deforestación, urbanización, sistemas de riego...)
Existen diferentes formas clínicas:
Leishmaniasis cutánea: Las llagas suelen ser indoloras y no causan otros síntomas a no ser que se desarrolle en ellas una infección bacteriana secundaria, caracterizada por enrojecimiento de las zonas adyacentes de la piel, dolor y, a veces, fiebre. Las úlceras se curan por sí solas al cabo de varios meses aunque pueden persistir durante más de un año. Dejan cicatrices permanentes similares a las causadas por quemaduras.
Leshmaniasis mucosa: comienza con una llaga en la piel que llega a destruir tejidos en las mucosas de la nariz, boca o garganta causando obstrucción nasal, secreción nasal o epistaxis. Con el tiempo, la persona afectada puede presentar una desfiguración grave.
Leishmaniasis visceral (kala-azar): afecta los órganos internos, en particular la médula ósea, los ganglios linfáticos, el hígado y el bazo. No todas las personas infectadas desarrollan síntomas. Puede comenzar de forma repentina, aunque generalmente se desarrolla de forma gradual durante semanas o meses después de la picadura de la mosca. Sin tratamiento puede provocar la muerte.
Los fármacos utilizados para el tratamiento dependen de la forma clínica de la leishmaniasis, el estado del sistema inmunitario de la persona afectada, la especie de leishmania que está causando la infección y dónde se contrajo.
Las tasas de curación son altas con los medicamentos apropiados, sobre todo cuando el tratamiento se inicia antes de que afecte al sistema inmunitario.
La muerte por lo regular es causada por complicaciones, como otras infecciones, y no por la enfermedad en sí. A menudo, ocurre en un período de 2 años.