Mononucleosis: una infección con gran impacto

Un beso puede cambiarlo todo.

Y no, no es una metáfora romántica.

La mononucleosis infecciosa afecta sobre todo a adolescentes y adultos jóvenes.
Y aunque a veces pasa desapercibida, otras veces deja semanas de agotamiento profundo, ganglios inflamados, fiebre y, en algunos casos, secuelas.

Detrás de ella está el virus de Epstein Barr, un virus muy común, pero del que sabemos poco en el día a día.

Es muy importante conocerla, saber  cómo se presenta, qué la causa, y por qué es importante detectarla, diagnosticarla y tratarla con el respeto que merece.
Porque incluso las infecciones “leves” pueden tener un gran impacto.

El diagnostico, aparte de la sintomatología, se confirma con pruebas de laboratorio:

• Aumento de leucocitos (células blancas), siendo típicos la 𝐥𝐢𝐧𝐟𝐨𝐜𝐢𝐭𝐨𝐬𝐢𝐬 y el predominio de linfocitos atípicos.

• Prueba rápida para detectar anticuerpos no específicos.

• Prueba para detectar anticuerpos específicos contra el EBV en sangre e identificar de IgM o IgG (infección más o menos reciente).

El tratamiento inicial se basa en controlar los síntomas, mantenerse hidratado y guardar reposo.

¿Has tenido esta enfermedad o conoces a alguien que la haya pasado?